
Josefa Martínez Fernández nació en La Bañeza el 8 de abril de 1922. Fue la octava de los 11 hijos de Pablo y Honorina, un matrimonio de labradores con los que trabajó en el campo hasta que a los 20 años se casó con Manuel Acedo, un joven de Pozuelo del Páramo que era hermano de una de sus cuñadas.
El matrimonio tuvo seis hijos: Lolo, Pepe, Adolfo, Fina, Ernesto y Luisi. Y abrieron la fábrica de gaseosas “La Espumosa” en la zona de expansión de La Bañeza, próxima a la estación del tren. En ella trabajaron toda su vida. sirviendo bebidas a los negocios de hostelería y particulares de La Bañeza y su comarca.
La centenaria goza de buena salud y una memoria prodigiosa. Aunque sus piernas se han parado, ella nunca está quieta. Dedica su tiempo a leer el periódico y sobre todo a coser haciendo vainicas.
La celebración de los 100 años de Josefa empezó, como manda la tradición, en la víspera, con sus hijos poniéndole “la cuelga”.
El viernes día 8 disfrutó comiendo con sus hijos, yernos y nueras, y atendiendo a las personas que la felicitaron. Incluso respondió a una entrevista que le hicieron en la radio.
Y el día 9 vivió la jornada festiva reuniendo a 5 hijos, 12 nietos y 15 biznietos, y sus parejas, en una misa en la iglesia de El Salvador, cantada por el Coro San Genadio, y en la comida donde todos brindaron por “la joven centenaria”.